Si me das a elegir... me quedo contigo
No creo que lo has hecho esté bien. No creo que se pueda conseguir el corazón de nadie así, como tú lo estás intentando, pero todo tiene una excepción y la mía eres tú. Desde el principio supe que en algún momento debería elegir entre tú y el resto, ya que eres así. Eres una persona que solo sabe del todo o de nada, no sabes lo que son los grises o las medias tintas, no sabes lo que es querer a alguien solo un poco, solo sabes amar con el corazón, vivir contigo y conmigo es algo tan intenso, que no siempre sale bien, desde luego.
Pero antes de darte mi respuesta, antes de que sepas todo lo que pasa por mi cabeza, tengo que decírtelo: te quiero, pero eso no son formas. No me lo quiero tomar como un ultimatum, sino como un momento límite en el que no sabías cómo reaccionar. Necesito respirar tanto como estar contigo, aunque no solo contigo, sino también con el resto del mundo. Como me has hecho elegir, te elijo a ti, por supuesto, pero con mis condiciones.
Te prometo amor eterno, te prometo un mundo entero de alegrías y fantasías. Eso lo vas a tener a mi lado, entre tanto, yo no puedo renunciar a todo lo demás, lo siento. Quiéreme tal como soy y esa parte de mí no es otra que tenerte a ti, tenerme a mí y todo lo que me gusta. Seguro que ahora te parece que no eso así. Deberías creerme cuando te digo que con el tiempo compartir es la única opción, si estamos siempre juntos al final no lo soportaremos. El aire que nos da estar con otros amigos y con otras personas es lo que nos hace amarnos más. Te lo prometo.
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