Desde que te conocí, han pasado varios años, sin embargo, desde el primer segundo en el que nuestras miradas se cruzaron por pura casualidad, sentí algo muy especial: algo que me decía que tenía que conocerte, por que nuestras almas serían afines, perfectas la una para la otra, y conseguirían vivir para el resto de la eternidad enamoradas.
¡Y bien que hice en escuchar a mi loco corazón que en ese momento latió con fuerza por ti!,y es que desde entonces no ha hecho más que acelerarse en tu presencia, y de agradecerte que aparecieras de esa manera en mi vida, por que no he sido más feliz nunca hasta ahora, que tengo a una persona como tú a mi lado.
Esta es mi manera de decirte que gracias a lo que compartimos estos atravesando una de las épocas más felices de mi vida, en la que todo parece ordenado, todo está en su sitio, y todo es, simple y llanamente, perfecto.
¡Sobre todo ahora que vamos a ser uno más!, por que desde que me dijiste que en tu interior comenzaba a crecer una nueva y pequeña vida no quedo en mi de alegría. Me muero de ganas de sostener a nuestro pequeño entre mis brazos, por que ahora tendré dos razones bellísimas para vivir y por las que ser feliz.
Espero que puedas disfrutar de la misma manera que yo de nuestro pequeño, un ser excepcional que nacerá y crecerá rodeado por amor.
Gracias por hacerme el mejor regalo del mundo, a partir de ahora estaré siempre en deuda contigo y no habrá manera de que la pueda saldar: por ello quiero entregarte para siempre mi corazón, sin condiciones.
Gracias por hacerme una de las personas más felices del mundo, te debo lo mejor de mi vida.
Te amo.