El vacío que has dejado
Sin casi mirar atrás has terminado con el amor que tanto tiempo hemos compartido, algo tan especial que nació de pura casualidad. Tanta que a veces imaginé a Cupido disparando su flecha caprichosamente hacia nosotros, para después ver como nos enamorábamos y éramos felices para siempre.
Dos desconocidos que la suerte unía para siempre para que su búsqueda de la felicidad fuera más sencilla al poder estar juntos.
Éramos muy jóvenes cuando probamos por primera vez nuestros labios, pero todavía no he sido capaz de olvidar ese característico y dulce sabor, tan único que desde que te vi por primera vez he llevado en lo más profundo de mi corazón.
Te he dado mi alma, todo mi cariño, mi amor, mi fe, y todo lo que poseo por he creído en ti y siempre he estado seguro de que podríamos estar juntos para siempre y formar una gran familia feliz.
Sin embargo, te escapas, huyes muy lejos de mi sin apenas dar explicaciones por que crees que ya no me amas y nuestro amor se ha terminado: ¿Que haré sin ti?, te añoraré en las noches y mientras duermo mi alma supurará sangre, por que no estas a mi lado y no puedo disfrutar de tu aroma junto al mio.
Has dejado un gran hueco que ninguna otra persona será capaz de cubrir, y es que entre todos los millones de personas que forman parte del planeta tierra tu eres la única para mi, la mujer más preciosa, la compañera perfecta, el auténtico amor de mi vida.
No sé que más decirte para que vuelvas de una vez por todas a mi lado, tan solo que sigues siendo una persona muy especial por la que daría mi vida, por lo que estoy dispuesta a perdonar todos los errores que ambos hemos cometido.
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